GUADINA MENOR

HUESA, QUESADA, POZO ALCÓN, LARVA

lunes, 4 de abril de 2011

CRUZ ROJA VOLUNTARIADO DE POZO ALCÓN

El pasado 01 de abril, el CMIM fue a la sede de Cruz Roja de Pozo Alcón para dar un taller sobre Igualdad y Coeducación a las personas voluntarias de dicha organización.
Los objetivos de dicho taller fueron los siguientes:
*Crear un espacio de reflexión sobre la situación de la mujer en nuestra sociedad actual.
*Tomar conciencia, para transformar dicha sociedad, que dista mucho de ser Igualitaria.
*Difundir la existencia del CMIM.
Esta actividad se clausurará con otro taller sobre prevención de la violencia machista.

SUBVENCIONES MARZO

BOP: DEL 16 DE MARZO DE 2011 Nº 61
AREA DE IGUALDAD Y BIENESTAR SOCIAL

Aprobadas las Bases reguladoras de la convocatoria de Subvenciones del
Área de Igualdad y Bienestar Social de la Diputación Provincial de Jaén, para
el ejercicio 2011 a favor de Confederaciones, Federaciones y Asociaciones sin
ánimo de lucro.

PLAZO HASTA EL 8 DE ABRIL

BOE: DEL 21 DE MARZO DE 2011, Nº68
MINISTERIO DE MEDIO AMBIENTE, MEDIO RURAL Y MARINO.

Resolución del 10 de marzo del 2011 de la Secretaria de Estado de Medio Rural y Agua, por la que se publica, para el ejercico del 2011, la convocatoria de subvecniones destinadas a la promoción de las mujeres en el medio rural.

RELATOS CON MOTIVO DEL 8 DE MARZO


Y Dios me hizo mujer

Gioconda Belli
Y dios me hizo mujer,
de pelo largo,
ojos,
nariz y boca de mujer.
Con curvas
y pliegues
y suaves hondonadas
y me cavó por dentro,
me hizo un taller de seres humanos.
Tejió delicadamente mis nervios
y balanceó con cuidado
el número de mis hormonas.
Compuso mi sangre
y me inyectó con ella
para que irrigara
todo mi cuerpo;
nacieron así las ideas,
los sueños,
el instinto.
Todo lo que creó suavemente
a martillazos de soplidos
y taladrazos de amor,
las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días
por las que me levanto orgullosa
todas las mañanas
y bendigo mi sexo.

Gioconda Belli;Poeta Nicaragüense

¡Qué poco es un solo día, hermanas,
qué poco, para que el mundo acumule flores frente a nuestras casas!
De la cuna donde nacimos hasta la tumba donde dormiremos
-toda la atropellada ruta de nuestras vidas-
deberían pavimentar de flores para celebrarnos
(que no nos hagan como a la Princesa Diana que no vio, ni oyó
las floridas avenidas postradas de pena de Londres)
Nosotras queremos ver y oler las flores.
Queremos flores de los que no se alegraron cuando nacimos hembras
en vez de machos,
Queremos flores de los que nos cortaron el clítoris
Y de los que nos vendaron los pies
Queremos flores de quienes no nos mandaron al colegio para que cuidáramos a los hermanos y ayudáramos en la cocina
Flores del que se metió en la cama de noche y nos tapó la boca para violarnos mientras nuestra madre dormía
Queremos flores del que nos pagó menos por el trabajo más pesado
Y del que nos corrió cuando se dio cuenta que estábamos embarazadas
Queremos flores del que nos condenó a muerte forzándonos a parir
a riesgo de nuestras vidas
Queremos flores del que se protege del mal pensamiento
obligándonos al velo y a cubrirnos el cuerpo
Del que nos prohíbe salir a la calle sin un hombre que nos escolte
Queremos flores de los que nos quemaron por brujas
Y nos encerraron por locas
Flores del que nos pega, del que se emborracha
Del que se bebe irredento el pago de la comida del mes
Queremos flores de las que intrigan y levantan falsos testimonios
Flores de las que se ensañan contra sus hijas, sus madres y sus nueras
Y albergan ponzoña en su corazón para las de su mismo género
Tantas flores serían necesarias para secar los húmedos pantanos
donde el agua de nuestros ojos se hace lodo;
arenas movedizas tragándonos y escupiéndonos,
de las que tenaces, una a una, tendremos que surgir.
Amanece con pelo largo el día curvo de las mujeres.
Queremos flores hoy. Cuánto nos corresponde,
el jardín del que nos expulsaron!


MEMORIAL DE AGRAVIOS
RIMA de Carmen González Huguet Para Yadira Calvo
Porque el blanco odia al negro
Porque el amo teme al esclavo
Porque el ladino necesita al indio
Porque somos distintas
Porque no débiles
Porque lúcidas
Porque el deseo
Porque somos malas y bellas como Satán
Porque irracionales
Porque corruptoras
Porque objeto de deseo
Porque quebrantamos todas y cada una de las leyes humanas y divinas
Sólo con existir
Porque somos el otro, es decir, la otra
Porque el diablo nos tiene por aliadas
Porque Judith se atrevió a cortarles la cabeza
Y a castrarlos simbólica y físicamente
Porque Dalila ídem
Porque Pandora y Eva
Se les salieron del huacal
Porque la Medusa
Porque las Sirenas
Porque las Parcas
Porque las Furias
Porque Circe y su piara
Porque la Papisa Juana
Porque las brujas
Porque las putas
Porque somos las madres
Y tenemos el amenazante y terrible
poder de dar la vida entre las piernas
por todo eso
cuánto, en realidad,
nos odian y nos temen.




"Porque hay una historia que no está en la historia y que sólo se puede rescatar aguzando el oido y escuchando los susurros de las mujeres".Rosa Montero

“Lo más escandaloso que tiene el escándalo es que uno se acostumbra”.
Simone de Beauvoir
No a la violencia machista!!!

REQUIEM DE MADRE
Aquí yace una pobre mujer
que se murió de cansada.
En su vida no pudo tener
jamás las manos cruzadas.
De este valle de trapo y jabón
me voy como he venido,
sin más suerte que la obligación,
más pago que el olvido.
Aleluya, me mudo a un hogar
donde nada se vuelve a ensuciar.
Nadie me pedirá de comer
en mi última morada
no tendré que planchar ni coser
como condenada.
Cantan ángeles alrededor
de la eterna fregona
y le cambian el repasador
por una corona.
No lloréis a esta pobre mujer
porque se encamina
a un hogar donde no hay que
barrer,
donde no hay cocina.
Aleluya esta pobre mujer
bienaventurada,
ya no tiene más nada que hacer
y ya no hace nada.
Letra y música: María Elena Walsah


“(…) la mujer tiene destino propio,
(…) sus primeros deberes naturales son para consigo misma,
no relativos y dependientes de la entidad
moral de la familia que en su día podrá constituir o no constituir;
(…) su felicidad y dignidad personal tienen que ser
el fin esencial de la cultura”.
EMILIA PARDO BAZÁN


Mientras tú
Mientras tú,
llegas a casa,
abres una cerveza
observas la televisión
mientras tú
te acomodas en tu sillón de siempre
comentas lo duro que se pasa en la oficina
ocultas las veces que le propusiste a la
secretaria una cita
las veces que, con los compañeros, en el
café
piropeaste a las mujeres
mientras tú
decides a cuál bar irás hoy
o te sumerges en el comercial y espera la
cena
ella
trata de olvidarse de los piropos de mal
gusto
que soportó camino del trabajo
de las proposiciones del jefe y los clientes
ella trata de preparar la cena
arreglar la casa
sonreír a los niños
y pretender que tus escapadas son un juego
pasajero
y que a pesar de todo ella es una
señora feliz.»
Bessy Reina
Terrarium

 El enunciado mismo del problema (¿qué es una mujer?) me sugiere  inmediatamente una primera respuesta. Es signifi cativo que me lo plantee. A un hombre no se le ocurriría escribir un libro sobre la situación particular que ocupan los varones en la humanidad. Si me quiero defi nir, estoy obligada a declarar en primer lugar: “soy una mujer”, esta verdad constituye el fondo sobre el que se dibujará cualquier afi rmación (...)La relación entre ambos sexos no es la de dos electricidades, dos polos: el hombre representa al mismo tiempo el positivo y el neutro, hasta el punto que se dice “los hombres” para designar a los seres humanos, pues el singular de la palabra “vir” se ha asimilado al sentido general de la palabra “homo”. La mujer aparece como el negativo, de modo que toda determinación se le imputa como una limitación, sin reciprocidad. A veces me he sentido irritada en una discusión abstracta cuando un hombre me dice: “usted piensa tal cosa porque es mujer”. Yo sabía que mi única defensa era contestar:
“lo pienso porque es verdad”, eliminando así mi subjetividad; no podía replicar: “y usted piensa lo contrario porque es hombre”, pues se da por hecho que ser hombre no es una singularidad; un hombre está en su derecho de ser hombre, la que se equivoca es la mujer. “La hembra es hembra en virtud de una determinada carencia de cualidades” decía Aristóteles. “Tenemos que considerar el carácter de la mujer como naturalmente defectuoso”. Y Santo Tomás decreta a continuación que la mujer es un hombre “fallido”, un ser “ocasional ”.
Es lo que simboliza la historia del Génesis, donde Eva aparece como surgida (...) de un “hueso supernumerario” de Adán. La humanidad es masculina y el hombre defi ne a la mujer, no en sí, sino en relación con él; la mujer no tiene consideración de ser autónomo. (...) La mujer se determina y se diferencia con respecto al hombre y no a la inversa; ella es lo inesencial frente a lo esencial. Él es el ser Sujeto, es el
Absoluto: ella es la Alteridad.(...) ¿Cómo ha empezado toda esta historia? (...) ¿De dónde viene que este mundo siempre haya pertenecido a los hombres y que sólo ahora empiecen a cambiar las cosas? ¿Este cambio es un bien?¿Llevará o no a un reparto igualitario del mundo entre hombres y mujeres?(...) “Todo lo que han escrito los hombres sobre las mujeres es digno de sospecha, porque son a un tiempo juez y parte” dijo en el siglo XVIII Poulain de la Barre, feminista poco conocido. En todas las partes, en todas las épocas, los varones ha proclamado a los cuatro vientos la satisfacción que les produce sentirse reyes de la creación: “Bendito sea Dios que me ha creado según su voluntad”. Entre todas las bondades que Platón agradecía a los dioses, la primera era que le hubiera creado libre y no esclavo; la segundo, hombre y no mujer.»
Simone de BEAUVOIR, El segundo sexo.
Ed. Cátedra, Madrid, vol. I, pp. 49-50, p. 56).

ALGUN AMOR QUE NO MATE, DUKCE CHACÓN

Adiós mi amor:
Principio y fin. Tú y yo tuvimos un principio. He encontrado un trabajo lejos de aquí. Todo tiene un final. No te reprocho nada. Sé que la culpa, si es que hay culpables, es toda mía. Nunca debí consentir que me anularas así, me negué a mí misma, me he perdido de vista. Me pediste tiempo y te di toda la vida, todo lo hice por amor, te quise hasta ese punto, hasta éste. Ahora ya no. voy a aprender a quererme de nuevo, lejos de ti, lejos.
Cuando pase el tiempo suficiente, cuando te pierda el miedo, te mandará nuestra dirección para que puedas visitar a tu hijo.
Te quise hasta la locura. Ni un paso más

LA TÍA CRISTINA, ANGELES MASTRETTA

No era bonita la tía Cristina Martínez, pero algo tenía en sus piernas flacas y su voz atropellada que la hacía interesante. Por desgracia, los hombres de Puebla no andaban buscando mujeres interesantes para casarse con ellas y la tía Cristina cumplió veinte años sin que nadie le hubiera propuesto ni siquiera un noviazgo de buen nivel. Cuando cumplió veintiuno, sus cuatro hermanas estaban casadas para bien o para mal y ella pasaba el día entero con la humillación de estarse quedando para vestir santos. En poco tiempo, sus sobrinos la llamarían quedada y ella no estaba segura de poder soportar ese golpe. Fue después de aquel cumpleaños, que terminó con las légrimas de su madre a la hora en que ella sopló las velas del pastel, cuando apareció en el horizonte el señor Arqueros.
Cristina volvió una mañana del centro, a donde fue para comprar unos botones de concha y un metro de encaje, contando que había conocido a un español de buena clase en la joyería La Princesa. Los brillantes del aparador la habían hecho entrar para saber cuánto costaba un anillo de compromiso que era la ilusión de su vida. Cuando le dijeron el precio le pareció correcto y lamentó no ser un hombre para comprarlo en ese instante con el propósito de ponérselo algún día.
            -Ellos pueden tener el anillo antes que la novia, hasta pueden elegir una novia que le haga juego al anillo. En cambio, nosotras sólo tenemos que esperar. Hay quienes esperan durante toda su vida, y quienes cargan para siempre con un anillo que les disgusta, ¿no crees?- le preguntó a su madre durante la comida.
            -Ya no te pelees con los hombres, Cristina – dijo su madre- ¿Quién va a ver por ti cuando muera?
            -Yo, mamá, no te preocupes. Yo voy a ver por mí.
En la tarde, un mensajero de la joyería se presentó en la casa con el anillo que la tía Cristina se había probado extendiendo la mano para mirarlo por todos los lados, mientras decía un montón de cosas parecidas a las que le repitió a su madre en el comedor. Llevaba también un sobre lacrado con el nombre dy los apellidos de Cristina.
Amabas cosas las enviaba el señor Arqueros, con su devoción, sus respetos y la pena de no llevarlos él mismo porque su barco salía a Veracruz al día siguiente y él viajó parte de ese día y toda la noche para llegar a tiempo. El mensaje le proponía matrimonio: “sus conceptos sobre la vida, las mujeres y los hombres, su deliciosa voz y la libertad con que camina me deslumbraron. No volveré a México  en varios años, pero le propongo que me alcance en España. Mi amigo Emilio Suárez se presentará ante sus padres dentro de poco. Dejo en él mi confianza y en usted mi esperanza”.
Emilio Suárez era el hombre de los sueños adolescentes de Cristina. Le llevaba doce años y seguía soltero cuando ella tenía veintiuno. Era rico como la selva en las lluvias y arisco como los montes en enero. Le habían hecho la búsqueda todas las mujeres de la ciudad y las más afortunadas sólo  obtuvieron el trofeo de una nieve en los portales. Sin embargo, se presentó en cas de Cristina para pedir, en nombre de su amigo, un matrimonio por poder en el que con mucho gusto sería su representante.
La mamá de la tía Cristina se negaba a creerle que sólo una vez hubiera visto al español, y en cuanto Suárez desapareció con la respuesta de que iban a pensarlo, la acusó de mil pirujerías, pero era tal el gesto de asombro de su hija, que terminó pidiéndole perdón a ella y permiso al cielo en que estaba su marido para cometer la barbaridad de casarla con un extraño
Cuando salió de la angustia propia de las sorpresas, la tía Cristina miró su anillo y empezó a llorar por sus hermanas, por su madres, por sus amigas, por su barrio, por la catedral, por el zócalo, por los volcanes, por el cielo, por el mole, por las chalupas, por el himno nacional, por la carretera a México, por los aromados huesos de su papá, por las cazuelas, por los chocolates rasposos, por la música, por el olor de las tortillas, por el río San Francisco, por el rancho de su amiga Elena y los potreros de su tío Abelardo, por la luna de octubre y la de marzo, por el sol de febrero, por su arrogante soltería, por Emilio Suárez que en toda la vida de mirarla nunca oyó su voz ni se fijó en cómo carambas caminaba.
Al día siguiente salió a la calle con la noticia y su anillo brillándole. Seis meses después se casó con el señor Arqueros frente a un cura, un notario y los ojos de Suárez. Hubo misa, banquete, baile y despedidas. Todo con el mismo entusiasmo que si el novio estuviera de este lado del mar. Dicen que no e vio novia más radiante en mucho tiempo.
Dos días después Cristina salió de Veracruz hacia el puerto donde el señor Arqueros con toda su caballerosidad la recogería para llevarla a vivir entre sus tías de Valladolid.
De ahí mandó su primera carta diciendo cuánto extrañaba y cuán feliz era. Dedicaba poco espacio a describir el paisaje apretujado de casitas y sembradíos, pero le mandaba a su mamá la receta de una carne con vino tinto que era el platillo de la región, y a sus hermanas dos poemas de un señor García Lorca que la habían vuelto del revés. Su marido resultó un hombre cuidadoso y trabajador, que vivía riéndose con el modo de hablar español y las historias de aparecidos de su mujer, con su ruborizarse cada vez que oía un “coño” y su terror porque ahí todo el mundo se cagaba en Dios por cualquier motivo y juraba por la hostia sin ningún miramiento.
Un año de cartas fue y vino antes de aquella en que la tía Cristina refirió a sus papás la muerte inesperada del señor Arqueros. Era una carta breve que parecía no tener sentimientos. “Así de mal estará la pobre”, dijo su hermana, la segunda, que sabía de sus veleidades sentimentales y sus desaforadas. Todas quedaron con la pena de su pena y esperando que en cuanto se recuperara de la conmoción les escribiera con un poco más de claridad sobre su futuro, de eso hablaban un domingo después de la comida cuando la vieron aparecer en la sala.
Llevaba regalos para todos y los sobrinos no la soltaron hasta que terminó de repartirlos. Las piernas le habían engordado y las tenía subidas en unos tacones altísimos, negros como las medias, la falda, la blusa, le saco, el sombrero y el velo que no tuvo tiempo de quitarse de la cara. Cuando acabó la repartición se lo arrancó junto con el sombrero y sonrió.
            -Pues ya regresé – dijo.
Desde entonces fue la viuda de Arueros. No cayeron sobre ella las penas de ser una solterona y espantó las otras con su piano desafinado y su voz ardiente. No había que rogarle para qque fuera hasta el piano y se acompañara cualquier canción. Tenía en su repertorio toda clase de valses, polcas, corridos, arias y pasodobles. Les puso letra a unos preludios de Chopin y los cantaba evocando romances que nunca se le conocieron. Al terminar su concierto dejaba que todos le aplaudieran y tras levantarse del banquito para hacer una profunda caravana, extendía los brazos, mostraba su anillo y luego, señalándose a sí misma con sus manos envejecidas y hermosas, decía contundente: “Y enterrada en Puebla”.
Cuentan las malas lenguas que el señor Arqueros no existió nunca. Que Emilio Suárez dijo la única mentira de su vida, convencido por quién sabe cuál arte de la tía Cristina. Y que el dinero que llamaba su herencia, lo había sacado de un contrabando cargado en las maletas del ajuar nupcial.
Quien sabe. Lo cierto es que Emilio Suárez y Cristina fueron amigos hasta el último de sus días. cosa que nadie les perdonó jamás, porque la amistad entre hombres y mujeres un bien imperdonable.

CUENTOS CEIP SANTO CRISTO DEL PERDÓN DE HINOJARES Y CEIP SAN ISIDRO DE FONTANAR

Con motivo del día Internacional de las mujeres,8 de marzo, el pasado 16 de marzo, el CMIM se acercó al CEIP Santo Cristo del Perdón de Hinojares para llevar a cabo el taller "Érase una vez...". El objetivo es transmitir valores no sexistas a través de cuentos no tradicionales, sin estereotipos de género, y que nos ayudan a alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres.
Los cuentos fueron:
*Rosa Caramelo
*Arturo y Clementina
Después de contar los cuentos se invitó al alumnado a la elaboración de dos dibujos, se les repartió plantillas para colorear y recortar de los personajes de los cuentos.


A través de las imágenes y el texto, los cuentos transmiten estereotipos sexistas y discriminan a las niñas y a las mujeres, otorgándolas un puesto inferior y atribuyéndoles unos rasgos físicos y psicológocos, unas capacidades, unos roles y un estatus social específicos. Una actitud discriminatoria que afecta también a los niños y a los hombres, representados en situaciones variadas y valoradas, pero igualmente mutilantes. Los cuentos son sexualmente discriminatorios y sólo en raras ocasiones se dan situaciones en las que niños y niñas, hombres y mujeres cohabitan, comunican e intercambian.

Este taller se ha repetido en el CEIP San Isidro en Fontanar, Pozo Alcón, el 05 de abril de 2011.

8 DE MARZO DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER EN IMÁGENES

8 DE MARZO EN IMAGENES

Actos con motivo del 8 de Marzo:
Huesa:
*Teatro organizado por Diputación de Jaén para el alumnado de los Centros Educativos de Huesa.
*Charla La mujer durante el Franquismo.
*Charla Cuidar a la Cuidadora. De la mano del personal sanitario del Centro de Salud de Huesa.
*Charla Alzheimer y otras demencias. Federación de Alzheimer de Bailén.
*Café Tertulia y proyección de la Película Las Chicas de la Lencería.

Quesada:
*Teatro Obra: Las Planchadoras, dos funciones: para el IES y para la Ciudadanía de Quesada.
*Acto de celebración del 8 de marzo: Proyección de la película las Chicas de la Lencería, baile de la Escuela Municipal de Flamenco de Quesada y desfiles de Trajes de la mano de la Asociación de Mujeres Virgen de Tiscar de Huesa.

Pozo Alcón:
*Acto de celebración del 8 de marzo: lectura de relatos de la mano de la Asociación de Mujeres Santa Ana y Charla sobre Coeducación y Violencia de Género de la Mano del CMIM.